¿POR QUÉ ES BUENA LA VITAMINA K?
27.06.23
Los beneficios de la vitamina K son incontables. Su función principal es la de coagular la sangre para prevenir hemorragias, también interviene en la correcta formación de sistema óseo, ayudando a evitar la desmineralización en los huesos.
Este nutriente conocido como vitamina antihemorrágica o fitomenadiona, fue descubierto en 1935 por el Doctor Henrik Dam, quien demostró su importancia en el proceso de coagulación sanguínea.
El impecable trabajo del científico, lo hizo merecedor del Premio Nobel de Medicina en el año 1946. Posteriormente, nuevas investigaciones han revelado otras propiedades de esta vitamina.
La vitamina K es una sustancia liposoluble que nuestro cuerpo necesita para formar coágulos y detener los sangrados. Este nutriente esencial es obtenido a través de los alimentos que consumimos y se clasifica en tres tipos:
• K1 o filoquinona: se encuentra en los vegetales y hortalizas de hoja verde oscuro, como col rizada, espinacas, y brócoli, coliflor. Los pescados, los huevos y los cereales también la contienen, pero en menor cantidad.
• K2 o menaquinona: es producida por la microbiota de los intestinos es capaz de producirla. Además, está presente en los derivados de la soja, lácteos fermentados, carnes y huevos.
• K3 o menadiona: es una forma sintética elaborada para pacientes que no asimilan bien la vitamina K natural.
La vitamina K es la precursora de los llamados factores de coagulación, los cuales se encargan de detener el sangrado cuando nos herimos.
Esta vitamina liposoluble, es la responsable de sintetizar el tejido óseo mediante la producción de osteocalcina. Apoyando el desarrollo, crecimiento y mineralización de los huesos.
La osteocalcina no solo se encarga de fortalecer el sistema óseo, sino que también colabora en el metabolismo energético y en la espermatogénesis masculina.
La vitamina K mantiene la flexibilidad de las arterias para garantizar el paso del flujo sanguíneo. Además, regula el proceso de crecimiento celular y ayuda a neutralizar el estrés oxidativo.
Los análisis de sangre que miden la concentración de osteocalcina descarboxilada, son los más usados para diagnosticar un déficit de vitamina K. Otra forma de medir es realizando evaluaciones de velocidad de coagulación.
A parte, los médicos realizan una encuesta sobre la alimentación para saber la cantidad de vitamina K que consumes al día e interpretar los resultados de los análisis.
Para aprovechar correctamente los beneficios de la vitamina K, es necesario que incluyas estos alimentos es tu dieta:
Hojas de nabo, Perejil, Col, Espinaca, Berro, Cilantro, Albahaca, Orégano, Plátano, Aguacate, Tomate, Aceite de soja, Alfalfa, Aceite de oliva, Ciruelas pasas
• Lácteos: yogures, leche, mantequilla y queso.
• Carnes de cordero, pollo y ternera.
• Huevos
• Hígado de vaca
• Hígado de pescado
La Academia Nacional de Medicina de los Estados Unidos (NAM) recomienda, en mayores de 18 años de edad, un consumo equivalente a 120 microgramos para hombres y 90 microgramos para las mujeres.
Para que tengáis una idea, os digo que una taza de espinacas crudas aporta 145 microgramos de vitamina K. Por su parte, una taza de col rizada, sin cocinar, contiene 113 microgramos.
La coagulación y la mineralización ósea son los principales beneficios de la vitamina K. Sin embargo, la ciencia ha demostrado otras propiedades importantes para nuestro cuerpo:
• Controla las hemorragias menstruales: La vitamina K puede ayudarte a controlar el sangrado excesivo durante tu período menstrual. Su efecto regulador evita el desequilibrio hormonal, contribuye a mantener el tamaño adecuado del endometrio y previene la menorragia.
• Reduce la formación de varices: Los niveles adecuados de vitamina k en el organismo favorecen el correcto recorrido del flujo sanguíneo y evitan la aparición de varices.
• Cicatriza la piel: La vitamina K de uso tópico promueve la cicatrización de heridas o quemaduras, incluso la puedes aplicar en caso de acné, rosáceas, estrías y/o hematomas.
• Disminuye las ojeras: Las cremas de noche para el contorno de ojos a base de vitamina k, son ideales si tienes muchas ojeras. Esta vitamina facilita la microcirculación de la sangre en la zona, ayudando a disminuir el oscurecimiento. Una dieta balanceada puede suministrar la cantidad diaria de vitamina K que se requiere durante el día. También, hay suplementos enriquecidos con vitamina K para personas que presentan un déficit de esta vitamina.