ACEITE DE JOJOBA: EL ALIADO PERFECTO PARA LA PIEL
12.09.23
El aceite de jojoba siempre está presente en la cosmética natural, gracias a sus vitaminas y minerales, nutre la piel y la hidrata en profundidad.
Conocido como oro líquido, el aceite de jojoba es el mejor hidratante, ya que su composición es muy similar al sebo que produce nuestra piel. Posee un alto contenido de ceramidas y vitamina E, una combinación poderosa que sirve para mejorar el aspecto de la cara, de las manos, del pelo e incluso ayuda a combatir el acné.
Es uno de los ingredientes más empleados en la industria vegana, caracterizada por incluir en sus productos ingredientes de origen natural con múltiples beneficios para la piel. Y no es de extrañar, este aceite posee una gran cantidad de propiedades que conocerás a continuación.
El aceite de jojoba es una cera líquida natural extraída de las semillas de la planta simmondsia chinesis, también conocida como Jojoba.
Se dice que los Incas utilizaban este aceite para cocinar, como medicina y para protegerse del fuerte sol del desierto. Fueron ellos quienes lo denominaron “oro líquido”.
A diferencia de otros aceites vegetales, su estructura química es la más parecida a la del sebo producido naturalmente por la piel humana, permitiendo una mayor absorción y penetración. Esto lo convierte en un recurso cosmético único con maravillosas propiedades para la piel, las uñas y el cabello.
El extracto de semillas de Simmondsia contiene un 96% de ceramidas, unas moléculas que activan la regeneración de la piel y evitan la pérdida de agua transdérmica.
Además, integra vitamina E, proteínas, ésteres céreos y ácidos grasos esenciales como el Omega-6. Todos estos componentes poseen un poderoso efecto antioxidante que protege todo tipo de piel frente a las agresiones de los radicales libres.
Estimula la producción de colágeno, e hidrata profundamente, aumentando así la fortaleza y elasticidad natural de la piel. Este producto orgánico es increíblemente resistente al calor y la oxidación, evitando que se altere su composición con el paso del tiempo y manteniendo integras todas sus propiedades.
El aceite de jojoba es uno de los hidratantes vegetales más poderosos que existen, es por ello que se recomienda aplicarlo regularmente en el rostro y el resto del cuerpo. Su principal beneficio es que, al colocarlo sobre la superficie cutánea, no deja esa sensación grasosa característica de otros aceites.
Es rico en antioxidantes y vitaminas altamente humectantes, ayudando a retener la humedad natural de la piel para conservar una buena hidratación. Protege la dermis contra el estrés oxidativo causado por la exposición solar.
La cosmética natural aconseja utilizarlo como desmaquillante, ya que elimina las impurezas de forma suave sin alterar el pH cutáneo. Este aceite tiene una textura sedosa y muy confortable para masajes, incluso puedes agregar unas gotas de tu esencia favorita y te ayudará a relajarte rápidamente.
Las propiedades antisépticas, antiinflamatorias y antimicrobianas del aceite de jojoba, son perfectas para combatir los granos y espinillas.
Además, de limpiar a fondo los poros, al tener componentes antimicrobianos, impide que vuelvan a generarse incrustaciones en la piel, a la vez que calma y desinflama las zonas más afectadas, eliminando esas molestas rojeces que aparecen en el rostro.
También ayuda si tienes marcas o pequeñas manchas en la piel, ya que penetra en la dermis y cicatriza hasta disminuir y eliminar visiblemente los roces.
Para limpiar el rostro, impregna un algodón y pásalo por tu rostro con movimientos circulares, evitando el área de los ojos. Luego, pasa otro algodón limpio con agua para eliminar los restos del aceite.
Para hidratar la piel, aplica unas gotas de aceite de jojoba sobre la piel limpia y seca, distribuye con suaves masajes ascendentes hasta que se absorba completamente. No aclares.
Para el cabello demasiado reseco, aplica aceite de jojoba como una mascarilla de medios a puntas. Deja actuar de 20 a 30 minutos y después lava tu pelo como lo haces habitualmente. Repite este procedimiento 2 veces a la semana.
Para la caspa y/o el cabello graso, coloca unas gotitas en el cuero cabelludo y masajea durante unos minutos. Luego lava tu cabello con un champú anticaspa.
Para puntas quebradizas, coloca unas gotas en las puntas de tu cabello después de lavarlo, péinalo y repite la aplicación una vez por semana.