DESCUBRE CÓMO ELEGIR EL MEJOR PROTECTOR FACIAL SOLAR
16.05.23
Es fundamental elegir un buen protector solar. Ya no sólo en verano, si no, durante todo el año. A pesar de su importancia en todo el cuerpo, en el rostro es aún más importante, ya que en la calle y en el exterior en general, la cara es una de las zonas más expuestas y de las más delicadas. La solución para no tener problemas es evitar el sol. Y para ello, la mejor forma de conseguirlo es protegerse de él utilizando el protector solar facial adecuado.
Ahora que se aproxima el verano es el momento perfecto para hablar sobre ello. Muchas veces simplemente se elige un protector solar de factor elevado para el rostro, sin prestar atención a otros aspectos como el tipo de piel o el mero hecho de que ciertas zonas tienen unas necesidades más específicas que otras en el resto del cuerpo. Para solucionar todos estos problemas, te damos una serie de conejos.
Muchos de los protectores solares suelen dejar una sensación untuosa en la piel, además de la terrible capa blanca. Por esto es por lo que, muchas mujeres odian el paso de aplicar protector solar al rostro, sobre todo cuando hablamos de pieles mixtas o grasas, a las que les cuesta encontrar el equilibrio entre la protección perfecta, la hidratación adecuada y el control de exceso de sebo. Para evitarlo, hay que tener en consideración las siguientes indicaciones.
El primer fallo que suele cometerse es pensar que los protectores solares valen para todos los tipos de piel. Al igual que no existe dos tipos de piel iguales, no debes dar por hecho que cualquier protector solar servirá a todo el mundo. Hay que saber diferenciar cuándo necesitamos un simple fotoprotector y cuando será necesario aplicar un fotodérmico. Los fotodérmicos son nuevas fórmulas que protegen del sol al mismo tiempo que corrigen y previenen los problemas generados por la exposición solar, mientras que los fotoprotectores solo protegen.
Debes tener en cuenta cuál es el fototipo de piel de cada uno, es decir, la capacidad que tiene tu piel para asimilar la radiación solar, la cual dependerá de la tonalidad. Existe 6 fototipos diferentes:
Personas con pieles muy claras y con pecas. Aquellas que se queman con mucha facilidad y no suelen broncearse. En estos casos el factor de protección necesario será siempre de SPF 50.
Personas con pieles claras, con propensión a quemarse y que tras varias exposiciones al sol suelen broncearse un poquito. Estas necesitan un factor de protección SPF 50.
Personas con pieles claras durante el invierno, que se broncean con facilidad en verano, pudiendo llegar a quemarse en las primeras exposiciones. Lo ideal en estos casos es usar SPF 50 en el rostro y el cuerpo, en las primeras exposiciones, y SPF 30 una vez que ya se ha bronceado pero con precaución.
Son aquellas personas que tienen un tono de piel tostado, se brocean con facilidad y no suelen quemarse. Lo recomendable es usar SPF 50 en el rostro y SPF 30 en el resto del cuerpo.
Personas con la piel morena o amarronada, que se broncean inmediatamente, llegando a quemarse únicamente tras una larga exposición al sol. Estas personas necesitan un factor de protección SPF 30.
Personas de raza negra, que mantienen durante todo el año el mismo tono de piel y raramente llegan a quemarse. Lo recomendable es un factor SPF 30.
Un consejo que dan los expertos en dermatología es elegir un protector solar con niacinamida, un ingrediente activo que, además de ser muy hidratante en todo tipo de pieles, tiene acción calmante y la capacidad de equilibrar otros principios activos, causantes de irritaciones o reacciones en pieles con acné o sensibles.
Porque esto es otra, algunos protectores solares pueden llegar a causar granitos en algunas pieles.
La cantidad de producto que apliques en tu rostro variará según a quién le preguntes. Aunque la opinión más generalizada suele ser la longitud de uno y dos dedos de la mano.
Si tienes cualquier duda, puedes acercarte a cualquiera de nuestras tiendas que te atenderemos encantados.
¡Te esperamos!